El del arte es un contexto hostil e inestable. Laboralmente, un terreno impredecible y mal pagado. Para muchos artistas, insostenible. Hay datos. Proceden del Estudio sobre la actividad económica de los artistas en España coordinado por Isidro López Aparicio (Universidad de Granada) y Marta Pérez Ibáñez (Universidad Antonio de Nebrija), el primero realizado en diez años, y resulta revelador: «Más del 45% de los artistas afirma que sus ingresos totales anuales, ya sea por actividades artísticas o de otra índole, se sitúa por debajo de los 8.000 euros, es decir, por debajo del salario mínimo interprofesional en España. De esos ingresos, los que proceden del arte llegan al 20%. Más del 60% declara no tener una relación estable con galerías, y de los que trabajan con galerías, sólo un 25% declara que sus ingresos han mejorado desde 2008″.